Cuando mencionamos el tema de imagen personal causa animadversión en ciertas personas pues ellas asocian con estereotipos el hecho de pensar que no se deben tolerar juicios u opiniones sobre la imagen personal y que no deberían de determinar el pensamiento acerca de algo o alguien…

Y bueno, cuando participo en estas conversaciones, muchas veces también me he logrado percatar que adoptar esta posición hasta cierto punto “rebelde” puede ser un mecanismo de defensa para mantenerse en la zona de confort que te mantiene cómoda… A veces, por no decir muchas, resulta más fácil hacer o contar la historia a partir de los demás y no de uno mismo.

Mi manera de entenderlo es que nada tiene que ver con satisfacer a los demás, sino acerca de uno mismo. Soy yo misma la que tengo claro en como quiero ser percibida, y en ese sentido me encargo que las personas con las que me relaciono reciban los estímulos que necesito para lograrlo.

Imagen Personal no se trata de uniformarse, si quiera perteneciendo a la misma industria, se trata de que a partir de la individualidad y autenticidad logre utilizar mi apariencia, mis habilidades de comunicación, mi lenguaje corporal y mi actitud para comunicar todo aquello que fortalezca mis objetivos profesionales, personales y por supuesto sume a los objetivos y al propósito de mi empresa o la organización para la cual trabajo.

Entonces hoy le animo a que este tema no lo vea como una camisa de fuerza, sino como una oportunidad para darle vida a su personalidad y que todo ese sistema de comunicación no verbal (cabello, maquillaje, prendas de vestir, sonrisa, postura, voz, etc.) sean una fiel extensión de usted misma.

Véase hoy al espejo, eso que usted ve, es lo que los demás ven. Asegúrese que sea justamente lo que usted quiere.

Feliz inicio de semana,

Karla de TOP Consulting.