Cuando de hablar en público se trata, todos queremos que las palabras salgan como por arte de magia y en la mayoría de los casos resulta todo lo contrario. Hablar con fluidez quiere decir, hablar con mucha naturalidad y soltura. La comodidad se siente, y esto es percibido por nuestra audiencia como confianza y nos hace creíbles ante ellos.
¿Entonces, es importante? ¡Si y mucho!
Hoy quiero compartir contigo algunos #toptips que te pueden ayudar para ganar fluidez:
1. Para hablar con fluidez es necesario tener un vocabulario extenso. Este es el punto mas importante para lograrlo, ya que cuando estamos nerviosos, pareciera que las palabras escaparan de nuestra mente, así que debemos tener reemplazos a la mano. Con un vocabulario amplio, te será más fácil encontrar las palabras precisas para explicar tu mensaje. Leer es la mejor medicina. Una tía ha hecho de esta frase, su lema: “Quien no sabe leer embrutece, y quien sabiendo no lo hace, embrutece aún más.” Lean mucho, lo que sea, pero lean. Otro ejercicio que puede serles de utilidad es tomar diariamente una palabra nueva, desconocida para ustedes, e incorporarla en sus diálogos o conversaciones. Esto ampliara tu léxico.
2. Genera conversaciones del tema que abordarás. De esta manera, con naturalidad, podrás observar que cosas llaman mas la atención, que preguntas te pueden hacer, si habías pasado por alto alguna información importante, etc. Si se trata de una presentación ante varias personas, puedes decidir hablar como si estuvieras haciéndolo en una conversación. Esto te hará sentir cercano, genuino, y conectar con tu audiencia. Recuerda que no solo se trata de comunicar sino de emocionar también.
3. Practicar, una y mil veces. Los buenos oradores no nacen, se hacen. Probablemente al momento de hablar en público, no te sientas El mejor, pero tienes que hacerlo tantas veces lo necesites hasta que te transformes en ello. La ciencia dice que, sí se puede. Te invito a ver esta magnífica Ted Talk de la psicóloga Amy Cuddy https://www.youtube.com/watch?v=Ks-_Mh1QhMc
4. Cuando practiques, grábate con tu teléfono celular, con el propósito de observar las muletillas, palabras repetitivas, sonidos o titubeos. Al identificar y tomar conciencia de cuales son, tendrás la tarea de evitar usarlas y sustituirlas por otras. Establece este compromiso para ganar confianza y seguridad.
5. ¿Has escuchado la frase ¿“Piensa antes de hablar”? También es importante observar la velocidad y el ritmo con el que estas hablando. Debes darle espacio a tu mente de procesar lo que va a decir, por lo tanto, debes hablar despacio sin perder ritmo para que no suenes aburrido.
¡Espero te sean de utilidad!
Un abrazo,
Karla.